La siniestralidad laboral cae un 50% respecto a la época previa a la crisis
El nuevo reto es reducir la creciente incidencia de los accidentes de camino o de vuelta al trabajo
JOSÉ VICENTE RODRÍGUEZ El número de accidentes laborales que registra Málaga ha caído de forma significativa en relación al periodo 2004-2007, cuando la provincia se movía siempre en guarismos superiores a los 30.000 siniestros anuales entre leves, graves y mortales. El 2010 ya se cerró con poco más de 17.000 y el primer semestre de este ejercicio se ha cerrado con unos 7.500, lo que permite augurar descensos a final de año de hasta el 50% con respecto a la época más negra de la siniestralidad laboral.
La crisis económica ha influido sin duda en la rebaja del número de accidentes laborales, debido sobre todo a la caída de la actividad en la construcción, aunque los expertos también resaltan los grandes progresos obtenidos en el campo de la prevención de riesgos, con una mejor mentalidad tanto de empresas como de los trabajadores, según explicó ayer el decano del Colegio Oficial de Peritos e Ingenieros Técnicos de Málaga, Antonio Serrano.
El Colegio organiza estos días las octavas Jornadas Técnicas Andaluzas de Seguridad, Calidad y Salud Laboral, que se celebran en el Centro de Seguridad e Higiene en el Trabajo situado en la avenida Juan XXIII de Málaga. La preminencia de los ingenieros técnicos industriales en este sector es clara: el 80% de los técnicos en prevención que trabajan en Málaga han cursado esta titulación, con más de 500 profesionales expertos repartidos por la provincia en sectores como la construcción, la industria y los servicios.
«La seguridad y la concienciación han mejorado muchísimo. Recuerdo años horrorosos, con muchas muertes en la construcción. Se daba el caso de personas que trabajaban como pastores y al día siguiente estaban en una obra poniendo ladrillos, sin idea alguna de los riesgos y sin usar ninguna medida de seguridad. O de jóvenes, que trabajaban a destajo para ganar más y que también sufrían muchos accidentes», rememora Serrano. En Málaga, el número de muertes laborales ha bajado del entorno de entre 20 y 30 al año a los 11 que se registraron en los años 2009 y 2010. El primer semestre de 2011 lleva, de momento, 6, según la cifras aportadas en las jornadas, que se clausuran hoy.
Accidentes «en misión»
Con esta perspectiva, los expertos apuntan ahora a la necesidad de atajar la creciente incidencia de los accidentes «in itinere» o «en misión», un concepto que hace referencia a los siniestros que sufre el trabajador durante los desplazamientos de camino o vuelta a su lugar de trabajo. En Málaga, estos accidentes han pasado de representar el 4,8% de los siniestros totales en el año 2004 a suponer el 9,% en los que llevamos de año 2011. El tema cobra especial relevancia si tenemos en cuenta que los accidentes «en misión» copan un tercio de las muertes laborales en España. En 2009, por ejemplo, 312 de las 831 muertes laborales correspondieron a esta causa.
El exceso de velocidad, el cansancio y la fatiga, o la influencia del alcohol o de las drogas son algunas de la causas que están detrás de estos accidentes que, durante muchos años, no se vieron como un problema laboral. Hoy, también esa mentalidad ha cambiado. Estos días, por ejemplo, hay una campaña de la DGT y el Ministerio de Trabajo que invita a los trabajadores a ser prudentes al volante.
Las jornadas contaron ayer con las ponencias, entre otros, de la jefa de la Inspección de Trabajo en Málaga, Mercedes Muñoz, y del coordinador de Seguridad en el Trabajo de Fremap, Juan Antonio Martos.
