domingo, 26 de abril de 2009

El Trabajo es para la Vida





Hermandad Obrera de Acción Católica

   ANDALUCÍA    

 

TRABAJAR PARA GANARSE LA VIDA, NO PARA ENCONTRAR LA MUERTE

EL TRABAJO ES PARA LA VIDA. ¡NI UN MUERTO MÁS!

NO a la siniestralidad laboral

 

La salud laboral es cuestión de Justicia. De condiciones y ambientes de trabajo adecuados, donde se pueda desarrollar la actividad profesional con dignidad. Los mal llamados "accidentes" de trabajo se pueden evitar. Podrían desaparecer si se adoptaran siempre las medidas preventivas marcadas por nuestras leyes. Si se profundizara en una cultura real del trabajo saludable.

Durante el pasado año murieron en accidente laboral en Andalucía 171 personas, 2.020 resultaron graves y 154.262 leves. Casi una muerte cada dos días en nuestra Comunidad.

Ante esta realidad, invisible para nuestra sociedad, la Hermandad Obrera de Acción Católica, Iglesia de Jesucristo encarnada en el mundo obrero y del trabajo, queremos:

Solidarizarnos con los trabajadores muertos, con sus familias, porque el Evangelio nos lleva a ello: A mostrar nuestra cercanía, nuestra compasión, nuestra solidaridad… a tenerlos presentes siempre. En nuestras vidas, oraciones…

Hacer visible su drama porque…

Hoy disponemos de tecnología suficiente para mejorar las condiciones laborales y un marco legal avanzado para favorecer la prevención y educación en salud laboral. Es decir, vivimos en una sociedad moderna, con todas las condiciones para ser receptiva ante este problema.

Pero también sufrimos problemas como altas tasas de flexibilidad laboral e índices altísimos de externalización y subcontratación empresarial.

Y sobre todo, la persona sigue considerándose una herramienta más al servicio del beneficio económico.

Además, la crisis económica actual y las medidas que se pongan en marcha para afrontarla no pueden servir para degradar más las condiciones de vida y trabajo del mundo obrero. La precariedad y la flexibilidad del trabajo suponen poner en juego la vida y la salud de quien lo realiza y el futuro de sus familias. La lucha contra el desempleo no puede justificar un empleo a cualquier precio, porque la vida de un solo trabajador vale más que todo el oro del mundo.

La persona, imagen y semejanza de Dios, debe ser la medida de todo. También de la actividad económica y laboral. El valor del trabajo radica en quien lo realiza. No en productos, servicios o rentabilidades generadas. La Iglesia nos recuerda que:

"la solidaridad nos ayuda a ver al 'otro' no como un instrumento cualquiera para explotar a poco coste su capacidad de trabajo y resistencia física, abandonándolo cuando ya no sirve, sino como un 'semejante' nuestro (…) para hacerlo partícipe, con nosotros, del banquete de la vida, al cual todos los hombres son igualmente invitados" (Sollicitudo rei sociales, n. 39)

Dios quiere que el trabajo sea para la vida, no al contrario. Por eso, las trabajadoras y trabajadores cristianos, debemos luchar por esa vida… por esa dignidad.

Por todo ello, en esta despedida de esta intensa jornada vivida, nos emplazamos a continuar nuestras acciones de denuncia y concienciación, a continuar nuestras concentraciones en nuestras diócesis cada vez que un obrero pierda su vida en el tajo o en el camino al mismo, a mostrar nuestra cercanía a las víctimas de los accidentes laborales y a sus familias, a seguir llamando a la puerta de las instituciones, públicas y privadas, jurídicas, empresariales, sindicales y políticas, a no quedarnos tranquilos mientras existan personas que por razón de su trabajo  encuentran la muerte o pierden la salud.  Porque… EL TRABAJO ES PARA LA VIDA ¡NI UN MUERTO MÁS!

 

Hermandad Obrera de Acción Católica de Andalucía  -   25 de abril de 2009