Esta semana se pasará de 40 a 150 operarios, que trabajarán de lunes a domingo La Junta estima un plazo de seis semanas para concluir las obras más urgentes
Una decena de grandes grúas permitirán que se trabaje en varios edificios a la vez. / ANTONIO SALAS
El plástico, la única defensa contra el agua. / CARLOS MORET
Vecinos secan el suelo de su casa. / CARLOS MORET
Los vecinos de Nuevo San Andrés que estén en paro y que tengan conocimientos de albañilería podrán trabajar en la rehabilitación de sus casas afectadas por el tornado que azotó la zona el mes pasado.
En las protestas del pasado martes, en la que numerosos damnificados cortaron durante buena parte del día la avenida de Europa, junto a la necesidad de aligerar las obras de reparación de las cubiertas, los vecinos dejaron claro que el paro se había cebado con la barriada, y que había muchos brazos dispuestos a colaborar.
La empresa responsable y el Ayuntamiento han recogido el guante y ayer las oficinas de la dirección de la obra, en el antiguo colegio Félix Rodríguez de la Fuente, junto a la calle Hoyo Higuerón, eran un hervidero de personas, currículum en mano, para optar a alguno de los más de cien puestos que serán necesarios según el nuevo plan de actuación, que contempla intervenir a la vez en todos los edificios dañados, con una dotación de unas 150 personas y once grúas que intervendrán en simultáneo (hasta ahora trabajaban unos cuarenta operarios, según la Junta).
En el día de ayer se presentaron unos 300 candidatos. El concejal del distrito, Julio Andrade, explicó que serán necesarios vigilantes y peones con conocimientos de construcción para apoyar la labor que se realiza con las grúas. «Cogimos el guante de los vecinos y se lo hemos lanzado a la empresa».
De esta forma, el concejal dijo que hoy mismo se podría estar trabajando en todas las cubiertas, que suma unos 16.000 metros cuadrados, de manera que se reduzca al máximo el plazo para terminar las reparaciones.
Refuerzo de las plantillas
La delegada de Vivienda de la Junta, Josefa López, y el gerente de la Empresa Pública del Suelo (Epsa), Cristóbal Fernández, se reunieron ayer con las comunidades de propietarios para informarles de las novedades en el plan de trabajo. Así, según la Junta se ha acordado incrementar la plantilla, de 40 a 150 profesionales, que trabajarán en turnos de lunes a domingo.
De esta forma, se prevé que la reparación esté lista en seis semanas. Desde la Junta se informó de que el porcentaje de ejecución está ahora entre el 10 y el 15%, y agregó que el material necesario está disponible. La Consejería de Vivienda asume el coste de la reparación de aquellos bloques que no cubre el Consorcio (15 de los 59).
Estas novedades se producen después de que unos 150 vecinos se echaran a la calle el martes para exigir más celeridad en los trabajos después de que las últimas lluvias causaran destrozos incluso en pisos que no habían sido afectados por el tornado.
