jueves, 12 de noviembre de 2009

Las peticiones de ayuda a Cáritas para comida y vivienda suben un 41%

ESPAÑA | Cambia el perfil de la pobreza

Las peticiones de ayuda a Cáritas para comida y vivienda suben un 41%

Un albegue-comedor de Cáritas en el País Vasco | Mitxi

Un albegue-comedor de Cáritas en el País Vasco | Mitxi

  • De cada 100 euros donados a la ONG, casi 62 proceden de aportaciones privadas
  • El que acude a Cáritas ya no es "el pobre de siempre", afirman.
  • Cáritas destinó más de 200. 000.000 euros para atender a 9 millones de pobres

Jose M. Vidal | Madrid

Actualizado jueves 12/11/2009 18:21 horas
 

"Ante la situación de crisis que estamos viviendo y ante la gravedad de sus efectos sociales en las personas más vulnerables, Cáritas responde, y responde con todos sus recursos". Lo dice el director de los servicios generales de Cáritas, José Luis Pérez Larios. Además, ilustra su afirmación con datos concretos. Las demandas de ayuda urgente atendidas por Cáritas en la primera mitad del presente año han aumentado un 40,7% con relación a 2008. La mayoría de las ayudas son para alimentación, que subieron un 58%, y para vivienda, un 44,9%.

"En 2008 perdieron sus trabajos y ahora, cuando ya han agotado las prestaciones y subsidios, están perdiendo sus casas", resume la coordinadora del área de análisis social y desarrollo de la organización, Ana Abril, en la presentación del informe.

Junto a Pérez Larios y Ana Abril, en la rueda de prensa, en la que compareció asimismo el presidente de Cáritas española, Rafael del Río, se ofrecieron otros datos. Por ejemplo, la institución caritativa de la Iglesia católica destinó en 2008 a sus programas sociales un total de 216.916.013 euros, de los que se beneficiaron 9.102.406 personas dentro y fuera de España.

Estos datos confirman que los recursos invertidos por Cáritas en 2008 suponen un incremento del 8% con relación al ejercicio de 2007. Pero no en todos los sectores suben lo mismo. El mayor esfuerzo económico se hizo en acogida y atención primaria, con un incremento superior al 20% y una inversión de 24,8 millones.

Tras la atención primaria, se sitúan otros programas, como el de mayores, al que se destinaron casi 32 millones de euros, seguido de cooperación internacional, más de 24 millones de euros, empleo e inserción laboral, 23,7 millones, personas sin hogar, 18,6 millones, infancia, 10,4 millones, e inmigrantes, 10 millones de euros.

Por debajo de los 10 millones de euros de inversión anual, pero con un volumen de recursos y un número de personas atendidas muy importante, la Memoria 2008 de Cáritas da cuenta también de la actividad llevada a cabo en los capítulos de familia, mujer, drogodependencias, Sida o comunidad gitana, entre otros.

Perfil del pobre por la crisis

La gente que acude mayoritariamente a Cáritas ya no es el "pobre de siempre". Como dice Ana Abril, "surgen nuevos rostros de la pobreza". Hoy, son en su mayoría jóvenes parados en busca de su primer empleo, desempleados mayores de 45 años, parados recientes procedentes de empleos de baja cualificación, familias jóvenes de cónyuges menores de 40 años con niños pequeños a su cargo, mujeres solas con cargas familiares, mujeres inmigrantes que han venido a España dentro de procesos de reagrupación familiar, mujeres mayores con pensiones de muy baja cuantía e inmigrantes en situación irregular.

Entre los más afectados por la crisis, Ana Abril destacó la situación de los inmigrantes, que "se enfrentan a problemas como el endurecimiento de las condiciones administrativas, cuando son derechos fundamentales". Apuntó también que "no se está dando un número importante de retornos a través de los programas del Gobierno, sino a título personal, debido a las condiciones que se establecen y a los largos tiempos de espera".

Voluntarios y austeridad

Para hacer frente a la dramática situación potenciada por la crisis, el milagro de Cáritas se basa fundamentalmente en dos pilares: un gran número de voluntarios y mucha austeridad. Los voluntarios de Cáritas suman, en 2008, un total 56.998 personas, a los que hay que sumar los 145.000 socios y donantes, así como la dedicación de los 4.621 trabajadores remunerados adscritos a los distintos programas, centros y servicios repartidos por todo el Estado.

Junto a la importancia del papel de los voluntarios en la respuesta a los efectos de la crisis, Rafael del Río subrayó el esfuerzo de austeridad que, un año más, ha realizado Cáritas, para mantener en un porcentaje del 7,7%, apenas 8 céntimos de cada euro, los gastos destinados en 2008 al apartado de gestión y administración.

Siguiendo la tendencia de las últimas décadas, los enormes recursos manejados por Cáritas proceden en su mayoría de aportaciones privadas. En concreto, en 2008, de cada 100 euros, casi 62 proceden de aportaciones privadas y otros 38 de subvenciones públicas.