lunes, 2 de noviembre de 2009

"Los inmigrantes son los eternos perdedores"

ENTREVISTA: CARLOS GÓMEZ GIL Sociólogo de la Universidad de Alicante

"Los inmigrantes son los eternos perdedores"

El País, EZEQUIEL MOLTÓ, 2009-11-02

El sociólogo Carlos Gómez Gil (Madrid, 1963) dirige el Observatorio de la Inmigración en la Universidad de Alicante, que este año centrará sus sesiones precisamente sobre la crisis y sus geografías.

Pregunta. ¿Por qué un seminario sobre crisis y geografías?

Respuesta. La crisis es tan importante y acelerada, que nos hemos olvidado de que otros muchos países viven en crisis permanente y es importante que no se pierda la perspectiva y comprender su dimensión global para intervenir.

P. ¿La crisis afecta a los inmigrantes de doble manera?

R. Es una crisis única y singular, en cuanto la inmigración afecta tanto a países emisores, de donde salen, como a los países receptores.

P. ¿Cuál es ese panorama?

R. La crisis en los países occidentales provoca que no haya demanda de inmigrantes porque el empleo ha caído brutalmente y se ponen en marcha políticas regresivas en materia de inmigración en Europa que limitan derechos y posibilidades. Y en los países del sur, el inmigrante sabe que ese esfuerzo migratorio no debe hacerse por falta de oportunidades, y para complicar el panorama más, hay flujos de inmigrantes que regresan a sus países de manera espontánea. El resultado es endurecimiento de las condiciones de vida y la pobreza estructural de muchos inmigrantes.

P. ¿Y en la Comunidad Valenciana qué está pasando?

R. Aquí conviven en estos momentos tres sectores, una inmigración instalada, arraigada y con permisos permanentes, otra extraordinariamente precaria y vulnerable que sufre la crisis en primera persona, y además en otro sector de extranjeros comunitarios que viven segregados.

P. ¿Y ante esto la Administración qué hace?

R. La Administración valenciana está desbordada, por su propia crisis política y por la económica. La Generalitat se sitúa ante la crisis como una vaca mirando el paso del un tren, constata los hechos pero es incapaz de anticipar y dar respuesta a los problemas que tienen la sociedad y la economía valenciana. En el caso de la inmigración, la crisis se vive en las ciudades, que soportaron el esfuerzo de la llegada de inmigrantes hace unos años; los servicios públicos están recargados, y ahora se nota más la pobreza y la exclusión. En la Comunidad Valenciana además el deterioro del mercado es mayor, y eso afecta más a los inmigrantes, que sufren reducción de sueldos, endurecimiento de las condiciones de trabajo, un empeoramiento de sus condiciones de seguridad laboral. En el último año y medio, han desaparecido de la Seguridad Social 40.000 extranjeros, eso es toda la población de Dénia, esas personas no se han esfumado, viven aquí, están en el paro o trabajan en la economía sumergida.

P. ¿Por qué el drama de la inmigración es invisible o se quiere hacer invisible?

R. Por eso hay que insistir mucho en que el crecimiento económico y el superávit que tuvimos en 2005 – 06 fueron gracias a la inmigración, cuando el inmigrante era funcional desde el punto de vista económico y laboral no había problemas, pero con la crisis nos olvidamos de ellos. Los inmigrantes son los eternos perdedores, en la bonanza les acusamos de quitar puestos de trabajo y en la crisis les acusamos de restar recursos públicos. Y en las próximas elecciones autonómicas y locales los inmigrantes votarán, y eso será un paso importante de incorporación política, pero también debe servir para que los políticos vean que la inmigración no es sólo fiesta, sino que en la misma igualdad y condiciones deben de convivir con nosotros.

P. Y los Ayuntamientos, ¿cómo están reaccionando?

R. La crisis está superando a todos. Para España es la primera crisis con inmigrantes y para ellos es la primera crisis que sufren aquí. Todos estamos aprendiendo, pero los inmigrantes no tienen el colchón familiar de respaldo y entre ellos se están ayudando. Y ante eso, los ayuntamientos debían prestar más atención a colectivos que se están quedando fuera y tendrán difícil reenganche económico, social y laboral. Qué pasará con los jóvenes o niños inmigrantes, su futuro es incierto, qué pasa con los que después de reagrupar la familia ahora quieren volver, aquí se apostó para que fueron autónomos y ahora muchos están en el paro, y debían tener un enganche formativo. Y es importante que los sectores desfavorecidos no se queden colgados, si no tendremos una sociedad dual, y eso es un peligro tremendo.

P. Y en el Observatorio se pone en marcha también un taller de formadores sociales expertos en inmigración.

R. Es muy importante hacer una formación especializada, actualizada y reflexiva. Y ahora toca reconsiderar el papel de la crisis, y el curso de formación de técnicos sociales especializados en inmigración, tenemos que reflexionar sobre el papel de los servicios sociales tienen en la crisis, tenemos cien alumnos y tenemos lista de espera.